.png)
Decidimos aventurarnos una semana más en el hermoso pueblo de Miraflores. Esta vez la ruta nos llevaría a parajes que en la jornada del sábado pasado no llegamos a visitar.
Iniciamos nuestro camino en la Fuente del Cura, un lugar ideal para comenzar rutas en la zona por su pequeño gran parking. Foto inicial para el Facebook.
Los robles nos mostraron el camino hasta la amplia pista que nos llevaría hasta los lugares más hermosos que aquel lugar escondía.
Nos adentramos en busca de la hermosa cascada del Arroyo de San Blaz, Un paraje escondido en un bosque de pinos que nos sorprendió a todo el grupo.
Continuamos la marcha campo a trabes por el bosque hasta que llegamos a una amplia pista que nos conduciría hasta un destino que a todos nos sorprendió gratamente.
Los diecisiete Hermanos y su pradera nos mostraron las hermosas vistas de la montaña y del embalse, lugar de nuestra siguiente visita.
Llegamos al embalse y disfrutamos su silenciosa calma. En estos tiempos contemplar un embalse que tenga una cantidad adecuada de agua es algo maravilloso.
Una amplia pista nos llevo de vuelta al lugar donde teníamos los coches aparcados.
.png)