Embalse de la Maliciosa un paseo invernal.

A las 9:00 de la mañana estábamos en la Pastelería Cafetería DomCa,lugar de encuentro elegido por tener un local acogedor, un servicio extraordinario y una gama de productos de gran calidad. Como siempre todos llegamos a la hora, disfrutamos del desayuno y nos pusimos al día de nuestros asuntos.

Iniciamos el camino, por las calles de Becerril de la Sierra en dirección a los pies de la Maliciosa. La avenida de José Antonio parecía no acabar nunca y cuando llegamos a la carretera M-617 y cruzamos por el paso de peatones para coger el sendero, se podía decir que la aventura ahora sí había comenzado. Fue el momento que elegimos para realizar nuestra foto de inicio de ruta y alguna más con la Maliciosa de fondo.
La senda paralela al arroyo nos llevo hasta otra de mayores dimensiones que nos dejaría en el embalse de la Maliciosa. El camino era amplio y cuando llegamos a Vista Real Club Escondido este comenzó a tomar forma de fuerte ascensión.
El paisaje era semejante a la Pedriza, sus rocas tomaban formas muy singulares y extrañas. Nos paramos varias veces a descansar y fotografiar aquel extraño y hermoso paisaje con un fondo espectacular de la Maliciosa.
La cuesta, cada vez se ponía más dura pero a nosotros nos daba igual, nos lo estábamos pasando muy bien y disfrutamos del camino. Paradas para tomar aliento y fotografiar el paisaje y continuamos la marcha. 
Llegamos a la señal donde la senda continua pero ya de descenso o nos desviábamos hacia el camino que nos llevaba hasta la Maliciosa. Elegimos el segundo. Fotos de la Maliciosa y del paisaje de Becerril de la Sierra y Navacerrada, que en breve visitaríamos.
Seguimos la senda que ponía la Maliciosa 3 km y nos topamos con el embalse del mismo nombre. Un lugar frió, de vistas preciosas a nuestra montaña de caminatas nocturnas. Un paraje donde las fotos no cesaron. El grupo continuo el camino dirección a la Maliciosa pero aquella ruta no estaba programada por aquella zona y tocaba regresar hasta el cruce y luego descender siguiendo la amplia senda que minutos antes abandonamos.
El descenso por el sendero fue rápido, pero las paradas para contemplar el embalse de Navacerrada fueron varias. Las vistas del embalse eran espectaculares pero si uno giraba 180º se daba cuenta que las vistas eran espectaculares. La Maliciosa no quería despedirse de nosotros y ahora hasta podíamos ver la Bola del Mundo.

Llegamos a la carretera M-607, la que una vez más teníamos que cruzar. Nuestro destino era sin duda el embalse de Navacerrada. Caminamos por las calles de aquella arabización que no se si pertenecía a Navacerrda o a Becerril de la Sierra.

Bueno, minutos después supimos que estábamos en Navacerrada, los carteles la delataron. Entramos  Entramos en un precioso paseo, donde la gente disfrutaba de la naturaleza cerca de sus casa y este nos llevo hasta el majestuoso embalse de Navacerrada.
Paseamos por la orilla del embalse, las vistas de la Maliciosa eran una vez más un espectáculo impresionante. Por decisión unánime montamos el campamento y nos pusimos a comer. Ningún restaurante tiene unas vistas tan maravillosas. El embalse de Navacerrada a un lado y al otro la majestuosa montaña.
El descanso llego a su fin e iniciamos la marcha para recorrer el ultimo tramo de nuestra ruta del día.
Caminamos por la orilla del embalse, subidos por las piedras, paseado por la arena hasta que llegamos a la puerta de salida que hay a la altura de la presa.
Cruzamos la carretera hasta un pequeño mirador, desde el que contemplamos una vez más el precioso paisaje de fondo.
Descendimos por la carretera, calle abajo, entrando en Becerril de la Sierra. Dejamos las mochilas y el resto de equipo en los coches y nos fuimos a un local cercano ha celebrar el final de ruta.