En esta ocasión la Ermita de San Isidro en el Boalo sería nuestro punto de encuentro para esta nueva ruta de senderismo.
Iniciamos la marcha en dirección al pueblo del Bolao. Atravesamos la localidad contemplando sus viviendas y algunos lugares interesantes con historia.
La Colada de Matalpino un camino amplio y fácil de transitar, nos llevó hasta el sendero por el cual realizaríamos la subida al collado de Campuzano.
Llegados al collado, nos dimos cuenta de que estábamos en la Pedriza. Las vistas que teníamos eran de la esplendorosa masa granítica más famosa de nuestra querida sierra.
El Collado de Quebranta huesos fue la culminación en nuestra visita exprés a la Pedriza, aquel lugar formaba parte de ella y las vistas no engañaban.
Nuestro camino seguía siendo de ascenso por aquel precioso territorio rocoso. Los diversos miradores nos hicieron disfrutar del paisaje.
Nos tocaba descender en dirección a la Ermita de San isidro, esta vez sin pasar por el pueblo. Descendimos por un pequeño sendero hasta llegar a la pista que nos llevo al punto y final de esta preciosa aventura.
Comimos en la preciosa pradera que había junto a la ermita dando por concluida nuestra aventura.
Podíamos decir aquello de