BELLAS VISTAS DESDE VALDEMANCO

Muy cerca de la Cabrera hay un pequeño pueblo de empinadas calles, habitantes sociables y con bellos cerros llamado Valdemanco. Aquel precioso lugar fue el elgido para disfrutar un sábado más de una preciosa ruta. 
Las 9:00 de la mañana fue la hora elegida, desayunar y nos poníamos en marcha. El bar Alegría fue el elegido. Desde contemplamos la montaña que teníamos que ascender minutos después.
Desayunados cogimos las mochilas y nos dirigimos pueblo arriba hasta encontrar la senda. la ruta había comenzado.
FOTO INICIO RUTA

  

Comenzamos, el camino por una amplia pista que nos llevaba sin retorno hacia lo más alto de aquel cerro. Disfrutamos de las preciosas vistas que en nuestro pequeño ascenso íbamos encontrando.

  


En el camino de ascenso descubrimos hermosos rincones donde hacer una parada y retomar las fuerzas. 

  
desde las alturas siempre se dice que las vistas son más bonitas. Nosotros podíamos afirmarlo. Observamos la Cabrera en todo su esplendor, la A-1 y sus coches, las torres de Madrid... El paisaje era digno de observar.

  
Llego el momento que todos estábamos esperando desde el principio de la ruta la gran ascensión. Los ciclistas se bajaron de sus vehículos, nosotros avanzamos lentamente. En aquella cuesta nos dejamos el alma, el corazón, los pulmones. Su fuerte pendiente, piedras sueltas, zanjas, dificultaban aun más caminar por aquella inclinada senda.

  
A la cima fuimos llegando a cuenta gotas, Paradas y alguna que otra parada. Era un ascenso duro y complicado que cada uno lo hizo a su ritmo.
  

  
 Llegamos todos, descansamos en unas rocas. Algunos fuimos a explorar y disfrutar del paisaje. Todo aquel lugar era precioso. las vistas eran de lujo.






ascendimos hasta un nuevo cerro donde las vista eran espectaculares y el viento y el frió nos estaban matando. Buscamos un lugar resguardado y comimos.
  

  

Las vistas desde aquel lugar eran de postal. Paramos unos minutos para disfrutar de ellas y deleitarnos.
El vídeo lo resume todo.

  

  
Continuamos la marcha a duras penas. El viento casi, casi huracanado nos llevaba casi inclinados. Prometo que cogí un par de piedras para no salir volando. Ja,ja.
Viento del Norte frió helador asegurado ni una foto se podía hacer. Fue un momento duro de la ruta literalmente volamos para salir de aquella cresta.


Este vídeo lo grabe y tuve la mano helada 10 minutos. ¡Que frío!
  


Comenzamos el descenso hacia el punto de partida. El frío nos acompañaba y en algún que otro claro el viento seguía haciendo de las suyas.
Hay ante nosotros estaba Valdemanco

¡¡¡RUTA SUPERADA!!